DESPUÉS DE LA RISA VIENE EL LLANTO

Apataki de Osa-Irete

Las ranas no tenían donde vivir y estaban haciendo mucho ruido; Obatala las dejo entrar en su casa y ellas continuaron con el ruido. Las amolesto y como no le hicieron caso, las boto de su casa. Después de la risa viene el llanto y Obatala maldijo a las ranas y les dijo: Mientras el mundo sea mundo Uds. vivirán cantando.